Uf! Después de algún tiempo, vuelvo a dejar caer algo por aquí,
desde hace unos días me he visto involucrado en un maremágnum de actividades en
mi centro de trabajo derivadas de una supuesta visita previa a una certificación
en ISO, el 9000 que ustedes gusten y manden, lo que me ha llevado a algunas
observaciones que sin esa presión quizá no hubiese podido realizar.
Trabajo en PEMEX, la empresa de todos los mexicanos, es
decir soy el mas humilde de sus servidores de todos ustedes que han nacido en México,
me jacto de que la mayoría de las veces me declaro y actuó en contra de los
principios que gobiernan los actos de mis compañeros de trabajo, aunque no
niego que en ocasiones sucumbo a la negligencia e ineficacia que es norma general
en la paraestatal, me avergüenza decirlo, sin embargo para efectos prácticos
hay que recordar que una golondrina no hace primavera.
Tengo en la empresa desde 2002 por lo que he pasado por
diversos departamentos, desde niveles muy buenos hasta mi actual posición de
trabajo que no es tan confortable como en otros tiempos, en estas últimas
semanas he podido reafirmar mi opinión respecto al trabajo que se realiza
dentro de PEMEX:
Dirección errónea o sin supervisión
Mandos medios evanecidos e ineficientes
Controles manuales dignos de la década de los 70’s
Presupuestos inoperantes o exagerados
Intereses personales ajenos totalmente a los intereses de la
patria
Sindicato mafioso
Personal de confianza “recomendado”
En fin que todo eso me hace recordar aquella canción de
Vicente Fernández donde le canta a los petroleros:
“Gózala ahora que puedes, ya la pagaras al rato”
Eso es en lo general de cómo esta la empresa que mantiene al
país, pero en lo particular quiero señalar un fenómeno que he observado, resulta que para trabajar en PEMEX como
sindicalizado lo único que necesitas es el certificado de preparatoria y
antiguamente solo necesitabas la secundaria, sin embargo por los salarios que
paga la empresa resulta atractiva para cualquier profesional (mal llamado en México
“profesionista”) por lo que de repente puedes encontrar realizando cualquier actividad
a profesionales, titulados o no y hasta con post grado, ese grupo que de alguna
manera en casi cualquier otra empresa estaría llamado a revolucionar los métodos
de trabajo en nuestro país y en nuestra empresa motor del desarrollo nacional
tristemente nos vemos relegados y hasta mal vistos… y en otros casos
simplemente nos adaptamos a la corriente que impera en el ambiente laboral
petrolero, al final solo quiero decir que en PEMEX no todo es miel sobre
hojuelas como muchos creen, y al final también solo quiero decirle a quienes
llevan la rienda de la empresa: “Gózala ahora que puedes, ya la pagaras al rato”